La perversa caricia de Satán / Le baiser du diable (1976)

La perversa caricia de Satán / Le baiser du diable (Jordi Gigó, 1976)

El plan de venganza de la espiritista Claire Grandier (Silvia Solar) nio puede ser más enrevesado y, además, concita cuanto tópico haya servido de argumento al cine de terror, desde Frankenstein (El doctor Frankenstein, James Whale, 1933) a las películas de vampiros de la Hammer, del fantaterrorr chez Profilmes a los nudies de Eurocine, productora que participa más o menos encubiertamente en el proyecto y que avala la ambientación francesa -aunque la película se rodara en el castillo de Sant Marçal de Cerdanyola- y la presencia en el reparto de Olivier Mathot en el papel del mad doctor Gambier y Evelyne Scott como la doncella Loreta, carne de doble versión.

Claire y Gambier se presentan en el castillo del duque de Haussemont (José Nieto) para realizar una sesión de espiritismo que sirva de distracción a los ociosos aristócratas invitados. La invocación -y acaso materialización- del fallecido hermano del duque, hace que éste se decida a ceder a la pareja los sótanos de su castillo para que realicen sus experimentos de regeneración a cambio de que le inicien en el espiritismo.

Pero el experimento de Gambier no termina con la regeneración de tejidos. Lo que el busca es crear vida y para ello no basta con sus fórmulas químicas, sino que hace falta un cadáver en buen estado -que robarán del cementerio local a la primera de cambio- y una invocación satánica, en las que la espiritista es experta. En lo que sacrifica una gallina y realiza unos conjuros ya está el cadáver de vuelta al mundo de los vivos. Ahora hará falta toda la fuerza mesmérica de Gambier para controlar las ansias de matar del nuevo monstruo de Frankenstein (Jack Rochin) -al que, no obstante, tildan de zombi- y dirigirlas contra el duque y todos aquéllos que no ayudaron al marido de Claire cuando estaban pasando apuros económicos, a causa de los cuales, él se suicidó.

Pero aún quedan un par de vueltas de tuerca argumentales, porque una vez liquidadas las cuentas con el duque, estrangulados un enano que ayudaba a la pareja (Ronnie Harp) y la doncella –convertida también en zombi asesina sin que sepamos nunca cómo-, el barón de Blanchart (Víctor Israel)  y fallecido Gambier debido a un infarto, Claire deberá controlar al monstruo ante la llegada al castillo del nuevo duque (Daniel Martín) y su novia (Maria Silva).

La película no llega hasta las pantallas -en programa doble- hasta principios de 1976, pero al parecer lleva en las latas desde 1973, lo cual, junto con la coproducción de Eurocine, convierte en obligada la doble versión: Desnudos varios y escenas de cama sólo se proyectan allende los Pirineos y, acaso, en una reposición de 1984, cuando se incluye en el programa "Gran Festival Erótico" del cine Postas, en programa triple con La cameriera nera (La camarera negra, Mario Bianchi, 1976) e Ilsa, Harem Keeper of the Oil Sheiks (Ilsa, la hiena del harén, Don Edmonds, 1976).